viernes, 8 de marzo de 2013

Una gran verdad: LA MUERTE

No hay nada más cierto en este mundo que la muerte y, nadie se escapa a esta verdad inconcusa y hasta misteriosa, aunque tengas ante tus pies todo el oro del mundo.
 
 
Por eso, yo no me río de la MUERTE, porque no hay forma de eludirla. Tampoco me río de los muertos, porque ellos ya descansan en paz y no tienen la oportunidad de defenderse y, porque también soy mortal. 
 
 
Del malogrado líder y ex Presidente venezolano Hugo CHAVEZ FRIAS, sus caros adversarios y hasta sus críticos implacables podrán decir lo que quieran; sin embargo, parafraseando al periodista Enrique A. PRETEL, sostengo que su mayor éxito ha sido elevar a las clases sociales más pobres de Venezuela al epicentro de la agenda política, hasta el punto de que ya no parece posible un programa electoral sin la justicia social como bandera.
 
Para tal cometido, con mucha pasíon desató un permanente combate político con los clásicos líderes de los diferentes partidos políticos que "gobernaron" Venezuela, la prensa insulsa y rastrera, la jerrarquía eclesiástica, la elite empresarial, antiguos compañeros de armas y buena parte de la ciudadanía, quienes al unísono lo acusaban (interesadamente) de conducir a su país hacia el abismo.
 
Gracias a su denuncia frontal y hasta virulenta contra los poderosos y "dueños" de Venezuela, para bien o para mal, Hugo CHAVEZ revolucionó Venezuela. Cambió su Carta Constitucional y hasta el nombre del país (República Bolivariana), cambió las formas y colores de la bandera, del escudo y hasta el uso horario. En una campaña pólítica permanente, nacionalizó amplios sectores de la economía, es decir modificó la esctructura del Estado y le dio un giro radical a la diplomacía.
 
Quien quiera hacer algo importante para su pueblo, definitivamente tendrá que chocar con los intereses de los poderosos y, por consiguiente siempre tendrá opositores y detractores. El primer revolucionario de la tierra, fue Jesús de Nazaret, y él tampoco conquistó a todos, siempre tuvo renegados y contrarios, hasta hoy. Con mayor razón Hugo CHAVEZ, un hombre de carne y hueso, tan fieramente humano y sencillo como todos.
 
No obstante, hombres de su calidad y talla política, como mínimo merecen tratarlo con respeto, porque ya no es sólo él, sino que lo aclaman y lloran su partida todo un pueblo, su pueblo.
 
¡DESCANSE  EN  PAZ  HUGO  CHAVEZ...!, aunque la reconciliación y la paz social y política no luzca cercana ni sencilla en Venezuela. 
 
Lima - Perú, 07 de marzo del 2013.
Atte,     DANTE  PEREZ  DIAZ
           Abogado - Reg. CAL  N° 17300
 
     

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