"EL ESTADO INFAME", es el tìtulo de la Columna que en el Diario Gestiòn publica el economista de esta entrada, para efectos de comentarla compartirè el texto:
Muy bien, pienso que la explicaciòn que tienen los economistas (pueden leerla desde el segundo pàrrafo de la tercera columna) es razonable pero incompleta si nos atenemos al ejemplo del autor.
El tema es sencillo, si desconozco algo y los humanos ignoramos muchas cosas, recurro a quièn sabe, digamos, si encuentro que una de las columnas de mi Casa presenta fisuras preocupantes, no voy a reforzarla con una tabla u otro aparato porque soy Abogado e ignoro los pasos de una construcciòn y la estructura sobre la que se sostiene, por tanto, consulto con el Ingeniero Civil quièn debe resolver el problema y yo creer en lo que me dice, pero este ejemplo NO calza o es insuficiente en el Mundo de la Sociologìa pues, segùn mi propio entender, es la confrontación de ideas cuyo resultado es rico en "sentido comùn" que, a su vez se sostiene en la capacidad de pensar y la preparaciòn en la Universidad de la Vida.
Asì las cosas, no consulto porque desconozco, evalùo propuestas en las elecciones de cualquier autoridad, o no estoy interesado pues he comprobado que son necios y responden a otros intereses o simplemente creo pero no porque piense que es la panacea, le doy oportunidad a miembros de clanes que nunca nos ofrecieron una y asì nos han mantenido durante dos centurias.
Hemos elegido a los gobrernantes que mejor nos han engañado durante DOSCIENTOS AÑOS, y del futuro inmediato NO se vislumbra un cambio, porque la poblaciòn, los pobres, los idiotas, que reciben una educaciòn paupèrrima, deben luchar dìa a dìa para sobrevivir y las limitaciones como sus exigencias los encierran como carneros y sòlo atinan a obedecer y CREER que su situaciòn mejorarà, NO acuden al especialista, si algo son los polìticos, sin duda es ser ladrones y el pueblo cada cinco años elige a uno de ellos y se ha vuelto costumbre, lleva menos de DOSCIENTOS AÑOS, (era necesario aprender).
En consecuencia, al elegir un gobernante no elijo a quièn me solucionara el problema sino a quien me permite crear otros, no existe un paràmetro, màs allà de nuestro entendimiento y pràctica previa,
Si el polìtico es un ladròn lo eligirè, pues mi necesidad de supervivencia, educado o no y mi vocaciòn por el dinero fàcil, elemental exigencia para ascender en una sociedad fallida, es el panorama que necesito para hacer realidad mis sueños, el resto observa, han sido manipulados una vez màs.
Finalmente la menciòn de Carlos Antonio a los fondos de la ONP, es una clarìsima alusiòn a lo bien que nos irìa con las mayores estafadoras de la sociedad trabajadora, .las AFP.
Muy pronto enriquecerè este comentario con un microcuento "LA ELECCIIONES" que escribiera años atràs.
LAS ELECCIONES
Aníbal y Rosario
habían emitido su voto, regresaron sobre sus pasos y muy pronto, estuvieron frente al estrecho pasadizo que
los conducía a la austera habitación que compartían; el acostumbrado desayuno de las madrugadas,
ese domingo estaba sometido a las reglas de la democracia de uñas largas.
Tomaron asiento
en la pequeña mesa cuadrada, a sorbos lentos bebieron el café negro, ¿será el
último? y la respuesta se adivinaba en sus miradas.
El crepúsculo
anunció el fin de la jornada, en instantes por la televisión darían los resultados
proyectados del sufragio.
Triunfo del
candidato oficialista….
El silencio
palpitaba, no era el mismo, se escuchaba a la distancia, esperarían una vez
más, el insufrible juego de la escasez en la abundancia.
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