Este interesante trabajo fue compartido por mi amiga virtual Maritza Benvenuto
Maria Tisserant Ruiz
1 d
Un científico, quería probar una teoría. Necesitaba un
voluntario que llegase hasta las últimas consecuencias. Por fin lo encontró,
era un condenado a muerte que sería ejecutado en la silla eléctrica.
El científico le propuso al condenado, lo siguiente: él
participaría de un experimento científico que consistía en hacerse un pequeño
corte en el pulso, con el propósito de que su sangre fuera goteando lentamente
hasta la última gota. Le explicó que tenía mínimas probabilidades de
sobrevivir, pero que de todas formas, su muerte sería sin sufrimiento, ni
dolor; ni siquiera se daría cuenta.
El condenado aceptó, porque morir de esta manera, era
preferible a morir en la silla eléctrica. Lo colocaron en una camilla y ataron
su cuerpo para que no pudiera moverse. A continuación le hicieron un pequeño
corte en la muñeca y colocaron debajo de su brazo una pequeña vasija de
aluminio.
El corte fue superficial, sólo sus primeras capas de piel,
pero fue lo suficiente para que él creyera que realmente le habían cortado las
venas. Debajo de la cama, fue colocado un frasco de suero con una pequeña
válvula que regulaba el paso del líquido, en forma de gotas que caían en la
vasija. El condenado, podía oír el goteo y contaba cada gota de lo que creía
era su sangre.
El científico, sin que el condenado lo viera, iba cerrando
la válvula, para que el goteo disminuyera, con la intención de que pensara que
su sangre se iba terminando.
Con el pasar de los minutos su semblante fue perdiendo
color, su ritmo cardíaco se aceleraba y le hacía perder aire a sus pulmones.
Cuando la desesperación llego a su punto máximo, el científico cerró por
completo la válvula y entonces el condenado tuvo un paro cardíaco y murió.
El científico consiguió probar que la mente humana cumple
estrictamente todo lo que percibe y que el individuo lo acepta, sea positivo o
negativo, actuando sobre toda nuestra parte psíquica y orgánica.
Siempre he pensado que la mente no tiene límites cuando se
engaña ella misma. Peor aun cuando no entiende las cosas y fabrica lo que puede
para entender, como cuando vemos cosas que las tomamos como sobrenaturales pero
que en realidad no lo son.
O como cuando te dicen que tienes corona virus, la gente
muere de pura sugestión. Sin fuerza de voluntad para dar batalla.
Hoy se sabe que las pruebas dan positivos falsos y negativos
errados. Hoy se sabe, que en realidad no hay peligro de muerte a menos que
tengas tu sistema inmune comprometido.
Así que cuidado con la mente y sobre todo, en quiénes
ponemos nuestra fe...
Ramón Sosa.
MI OPINIÓN
José Guillermo Anderson Convengo que la sugestión puede
crear ilusiones buenas y/o malas, no sólo convengo sino que pienso que esta
"pandemia" no es más que un ensayo para el caos que generaría un
virus realmente mortal con el que cuenta el poder para deshacerse de gente
innecesaria (esta puede ser la conclusión de alguien -yo, en este caso,
altamente sugestionado por mis propios pensamientos) estudiando ahora las
reacciones de los humanos y a los estímulos que crean en el camino, la lucha
por una "vacuna" que es interferida por propuestas distintas que la
harían innecesaria (la vacuna) generando los peores comentarios contra la
Industria Farmacéutica -en su mayoría ciertos o con grandes posibilidades que
así sea,
Será como un viaje dando la vuelta al Mundo en un
Trasatlántico en el que el "Cuaderno de vitacora" habrá de registrar
los sucesos y equivocaciones que no se repetirán en la creación i diseminación
del próximo virus.
Sirva lo anterior para negar validez al experimento que
sirve de marco a mi opinión, al margen de la foto que NO puede corresponder a
la prueba en cuestión, al condenado le dijeron que tenía una insignificante
posibilidad de vivir si se quedaba sin sangre y esa razón es más que suficiente
para luchar por su vida, en la Silla NO tenía ninguna y si en verdad la
sugestión - de ser cierto el ejemplo- pudo causarle la muerte en las horas que
duró el experimento, en mi concepto, un condenado a morir en la Silla Eléctrica
o Cámara de Gas, JAMÁS llegaría al acto final, moriría irremediablemente antes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario