El señor César Ugaz se despacha contra el cúbil de alimañas que cada cinco años cambia parte de su perversa y pervertida conformación, pretendiendo darnos una lección de patriotismo, jejeje!!! ya le tocará y cada una de las líneas que ha escrito -el día de hoy en El Comercio- le cobrará con intereses la factura.
El Perú es como los carnavales se disfraza para presentar un rostro que contradiga la suciedad e inmundicia purulenta que se ganó con garras y confort.
Pero César Ugaz es un mal menor, Marilú Martens desafía la inteligencia en el enlace que comparto que no me molestaré en comentar, me gustaría en cambio que este personaje (la Ministra de Educación jejeje!!) pudiera hacer algo por su pares y no insultando a peruanas y peruanos.
Se han preguntado ¡¡POR DIOS!! ¿cual es el estatus económico de los maltratadores o asesinos de mujeres?, cuando tengan la respuesta sabrán por lo menos las causas de conductas demenciales y más aun criminales y no se queden, por favor, en la superficie extiendan el análisis a la clase pudiente y sus escasos representantes que sojuzgan a todo una Nación.
Publiqué, me parece en Planeta libro un poemario bajo el título "El silencio obtuso de las palabras" que puede bajarse gratis, incluye un petit cuento, los siguientes versos no sin antes puntualizar el porqué
"Pienso que
la lucha de los grupos feministas no calza en pueblos como el nuestro, pues
Al fin al
cabo lo que se busca es el poder y el poder mal que nos pese, es
discriminatorio.
Hay tanta
miseria en el mundo, en especial en las naciones tercer mundistas, que es
tiempo ya que TODOS, en especial las mujeres educadas e inteligentes que hoy en
día, a mi juicio, no tienen nada que envidiar a los hombres, antes que pensar
en sí, dirijan la enorme energía de la que disponen a luchar por la igualdad en
el conocimiento de mujeres y hombres, a presionar por una sociedad menos
injusta y ello no se logrará con predicas que sólo pueden aplicarse un pequeño
sector de la sociedad moderna, el resto, hombres y mujeres sufren un olvido de
centurias".
¡Oh
voluptuosa, inteligente, hermosa y
delirante
luchadora! ¿Has recorrido con
tu mirada
de igualdad la desigual naturaleza
de la vida?
¡Oh belleza
incomparable, mefistofélica y
persistente!
te has preguntado, iniciado el viaje
de
conquistas con arrojo, valentía y por
conocida,
de recatada coquetería, si aquellas,
que lejos
están del mágico engaño del poder
que reclamas,
con un niño en su regazo y otro
en sus
entrañas, ¡ella!, la de juventudes austeras,
repletas de
olvido, de ignorancia, de noches
de
ausencia, de cadavéricos, gélidos y abrasadores
días, bajo sus ropas raídas y macilenta figura,
contonea
las caderas con la cadencia insufrible
y salvaje
de la naturaleza.
Acaso no
has advertido que no hay rubor en su rostro
curtido por
el tiempo, no adivinas la nobleza de sus
encantos,
pasión, comienzo y fin de las broncíneas
manos deformes
y de los pies sin nombre de la tierra.
¡Oh
directora!, ¡académica!, ¡brillante y esquizofrénica
dulcinea!,
de eructables discursos de falda corta,
¿cambiarás
tu natural y efímero bullicio citadino,
tomándola
de la mano y sostendrás con el amor que
mueve al mundo, el alma de tu desigual
compañera.
Guillermo
Anderson Anderson
16-04-2008
Marilú Martens antes de escribir esquizofrénicos "discursos" debería empezar por educar a niñas y niñas que BIEN MERECEN LA EDUCACIÓN SEXUAL y que hombres y mujeres en lo sexual SON DIFERENTES y que el ABORTO es una decisión de AMBOS que la mujer es dueña de su cuerpo mientras no comprometa la existencia que, a través suyo, pide llegar a este Mundo.
Que se olvide del famoso género es camino sinuoso que no tiene donde llegar que no sea a la depravación y perdición de la especie que esta señora se empeña en representar.
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