Excelente artículo al que le falta su extensión al resto de las "instituciones" del Estado. Comparto uno de sus párrafos, el único con el que discrepo:
"Todo indica que ahora más que nunca el Gobierno, el Congreso y el mismo Poder Judicial están obligados a realizar una reforma total e integral, que involucre además a la ciudadanía (que debe estar vigilante a través de las distintas organizaciones de la sociedad civil). Como señala el artículo 139, inciso 17, de la Constitución, los ciudadanos tenemos derecho a la participación popular en el nombramiento y revocación de los magistrados".
Y discrepo sólo con el siguiente párrafo:
"(que debe estar vigilante a través de las distintas organizaciones de la sociedad civil)"
Esta distinción es, para mí, la causa de todos los males, ¿Por qué?, pues porqué elimina de un plumazo al pueblo, la "sociedad civil organizada" no es otra cosa que la creación de grupos con intereses propios, como los Sindicatos de trabajadores, empresarios, empresas y "puritanos" de toda estirpe, cubil -excluyamos con benevolencia a los sindicatos- de los "notables y personalidades" que son los responsables de toda la basura que por conocida o presumida, desborda la imaginación del adorador más entusiasta de las tropelías de Atila y son ellos a los que se remite el autor de la nota para corregir los males que han causado ¡¡ellos!! a lo largo de la historia a nuestra Patria.
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