Ejemplos de expresiones como las del título de esta entrada las escuchamos a diario, el corte de las opiniones cuando lo que expresa el oyente no le gusta al periodista que las solicitó y otras actitudes propias de "dioses y diosas de un olimpo en remate".
Doña Milagros Leiva a quien escucho entre las seis y siete de la noche en RPP no todos los días, es vívido ejemplo de lo que debe ser la mujer de un Papa si este pudiera casarse.
Lo que no entiendo es la invitación a congresista u otras personalidades para "cambiar ideas" sobre un tema en particular, si SIEMPRE TIENE LA RAZÓN (se sigue lamentando que Marco Arana le haya colgado el teléfono después de un largo comercial, jajaja!!!), aceptar la invitación de doña Milagros Leiva, en este caso por Marco Arana es producto del figuretismo pues son conscientes que hablar con una neardenthal del pensamiento es aceptar el maltrato sin lugar a reclamo pues siendo mujer parece una serpiente pitón y no más.
El tema de la señora Leiva era Venezuela, ¡contésteme señor Arana es o no un tirano Nicolás Maduro!, ¿que le debe la izquierda a Hugo Chavez?, ¡¡no tengo problemas en calificarlo de tirano, pero.....la conversación se interrumpe para informar de un sismo en Barranca, sigue un comercial y bueno Arana se cansó de esperar, apagó su celular. No tenía ningún sentido seguir la conversación de una con conclusiones de sólo una de las partes.
Únicamente el miedo obliga a los izquierdistas a NO hablar como hombres, con sangre en las venas, porqué después de todo desean llegar al poder y como el pueblo no piensa más allá de su nariz y conveniencias presentes, a lo que sumaremos la medicina preventiva que lanzan impresentables como Álvarez Rodrich incluyendo algunos que parecen inteligentes, los izquierdistas se orinan, su deseo es llegar al poder con el cuento que lucharan por los derechos de los pobres para ya, en ejercicio del gobierno ser la misma raza de ladrones.
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