Suelen los guionistas abordar temas escabrosos basados en el miedo, la vergüenza y, porque no decirlo, en las pasiones y miserias del ser humano, que. lo lógico es lo que menos importa (naturalmente si se obra cómo las circunstancias exigen, no existirían las películas) por lo tanto quién ha visto una no necesita ver las demás.
Este drama que estelariza la hermosa Joan Bennet y E.G. Robinson, un hombre enamorado mata al amante de la mujer que está prendado, el resto no interesa, lo que sigue son las peripecias, amarguras, de quién mata por que no tenía otra opción, bueno es el esquema general de todas las de su tipo,, en la película que comparto, sólo existe admiración del hombre por la dama y ésta supera cualquier expectativa de los libidinosos (sólo sexo o tal vez verdadero amor) primera diferencia, cuando Robinson da muerte al marchante de la mujer del cuadro decide llamar a la policía pero se arrepiente en el último momento, cuelga el teléfono cuando escucha , "en que lo puedo ayudar, corrí el filme y en cinco minutos la había visto, ahhhh, pero me equivoque, el final es un detalle fundamental y que la distingue del resto de este tipo de Cine.
Cómo es obvio, NO PUEDO CONTAR EL FINAL, perdería todo su encanto la motivación que precede.
No hay comentarios:
Publicar un comentario